Hospital de color y dinero azul

Hospital de color y dinero azul
Palabra Ciudadana
Martha Olivia López Medellín


“En la vida hay que ser moderado, al peligro no te arrojes; pero una vez ensartado, ni te aflijas, ni te aflojes”, dice Nicolás Mariscal Barroso, el fundador de la empresa Marhnos.

El nombre nada tendría que ver con los tamaulipecos hasta hace apenas un par de meses cuando se inauguró el hospital regional de Alta Especialidad, llamado pomposamente “Bicentenario”.

El señor Mariscal Barroso, es padre de Nicolás Mariscal Servitje y es al mismo que la Secretaría de Salud entregó el contrato 00012003-009-06, con el cual obtendrá 4 mil 108 millones 622 mil 504 pesos para el financiamiento de esta unidad médica.

Se afirma que el proyecto fue resultado de la licitación pública internacional, según datos del Instituto Federal de Acceso a la Información.

La Secretaría de Salud, encabezada por José Ángel Córdova Villalobos, decidió que la propuesta de Mariscal Servitje:
“Cumple con los requisitos establecidos en la convocatoria, las condiciones legales, económicas y técnicas requeridas en las bases de licitación, garantiza satisfactoriamente el cumplimiento de las obligaciones y ofrece la mejor proposición técnica”.

Infraestructura Hospitalaria del Noreste, la empresa ganadora del contrato de más de 4 mil millones de pesos, está conformada por tres compañías: Grupo IGSA, Grupo Dalkia y Grupo Marhnos, integrado en 1954 por los hermanos Nicolás y Mariano Mariscal Barroso. De herencia familiar, después de 20 años llega la segunda generación de los Mariscal.

Este apellido es importante no sólo en el mundo empresarial sino también en las filas de afiliación y aportaciones económicas del Partido Acción Nacional. Y estos fondos son casi una cuarta parte de los que obtuvo ese organismo político en el 2005, durante las precampañas electorales.

De acuerdo con la relación de depósitos en efectivo del Comité Ejecutivo Nacional del PAN 2005, tres integrantes de la familia Mariscal depositaron 2 millones 50 mil pesos:
Íñigo Mariscal Servitje, gerente de ingeniería de Marhnos, con 900 mil pesos; María del Pilar Mariscal Servitje depositó la misma cantidad, en tanto que Ignacio Mariscal Torroella donó 250 mil pesos.

No se necesita ser muy analista, para entender que la entrega de los contratos a estas empresas, equivale a favorecer a la gente que ha sido políticamente afín con el gobierno en turno. Es decir, la mezcla de política-negocio con sello azul.
En Ciudad Victoria, el famosísimo hospital fue inaugurado el 27 de marzo por Felipe

Calderón quien vino a dar un largo discurso acerca de las “primeras y últimas piedras” y oficialmente no ha entrado en operación, a pesar de que empleados médicos y de seguridad señalan que las labores comenzaron muy discretamente desde el pasado lunes dos de junio.

“Ya ha habido cirugías y consultas médicas desde el lunes antepasado”, aseguran, aunque todo se observa en completa calma.


marthaolivia16@gmail.com